La principal tarea hoy, es producir alimentos
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Debate previo a la 8vo Período Ordinario de Sesiones de la IX Legislatura, pone el punto sobre las íes, de la producción agropecuaria. Asiste el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Diaz-Canel Bermúdez.
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Estudios Revolución

La implementación de las 63 medidas aprobadas el pasado mayo para dinamizar la producción y comercialización agropecuaria concentró los debates de la jornada vespertina de trabajo de los diputados cubanos reunidos en el Palacio de Convenciones de La Habana.

El ministro de la Agricultura, Ydael Pérez Brito, presentó este lunes ante los diputados cubanos una actualización sobre el proceso de implementación de las 63 medidas aprobadas meses atrás para dinamizar la agricultura, con las cuales se busca incrementar las producciones, de manera que se amplíe la oferta de alimentos a la población.

En la sesión de trabajo —presidida por el Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo Hernández, y que contó con la participación del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez—, el Ministro de la Agricultura realizó una minuciosa exposición sobre cuánto se ha logrado avanzar, o no, en la aplicación y desarrollo de las medidas en la base, allí donde debe concretarse el autoabastecimiento alimentario municipal y donde más urge ver reflejados los verdaderos efectos de las medidas aprobadas.

De acuerdo con la explicación realizada por Pérez Brito, garantizar el éxito de su implementación demanda del esfuerzo colectivo de todos los organismos de la Administración Central del Estado que son responsables de las mismas, así como de los gobiernos locales, para su preparación, divulgación y capacitación. Al mismo tiempo, requiere el desarrollo de un sistema educativo en todos los niveles y la comunicación efectiva con el pueblo.

Entre algunos de los avances que se han ido concretando, a partir de la aprobación de las medidas, el Ministro comentó de manera especial la mirada que se ha dado desde la ciencia a los problemas existentes en el sector, lo cual constituye un elemento esencial para encontrar mejores soluciones a los problemas. No obstante, reconoció que «todavía nos falta mucho trabajo con las universidades, con la ciencia, para lograr los vínculos que realmente necesita el sector».

En el desarrollo de los polos productivos, dijo, es primordial estabilizar las producciones y lograr un mayor desarrollo, porque cuando se logran mayores producciones eso indiscutiblemente se traduce en una disminución de los precios.

Sobre los temas asociados a la ganadería vacuna, valoró que es aspecto que requiere ser mejorado y agilizar la entrega de tierra a todos los propietarios de ganado y productores con diez vacas o más. «Esos tienen que tener una atención priorizada».

De igual manera comentó sobre las acciones que se han realizado para incrementar la fuerza de trabajo y sembrar más tierras, dos elementos esenciales para lograr los propósitos que se ha trazado el país. «Es primordial transformar y fortalecer la empresas y hacer mejores colectivos laborales que se parezcan a los usufructuarios».

Es básico, evaluó, desarrollar el sistema cooperativo y agropecuario, pues en sus manos está la mayor parte de la tierra del país. «Ir a los municipios a retroalimentarnos ha sido muy importante para buscar nuevas ideas». Justamente en los municipios, reconoció, es básico el trabajo en las comunidades agropecuarias, en las cuales es imprescindible mejorar las condiciones de vida de los productores.

Asociado al proceso de contratación, aseguró que se perfecciona el contrato para que juegue el verdadero papel que le corresponde como instrumento de relación entre las formas productivas y los productores individuales en los planes de siembra, producción y ventas.

Detalló el Ministro que existe un sistema de trabajo para la evaluación de los impactos de las medidas a nivel de nación, provincia y municipio, a partir del cual cada organismo y los gobiernos locales rinden cuentas del cumplimiento de las responsabilidades que les corresponden, considerando los indicadores y metas de cada medida.

La implementación de estas medidas, aseveró, ha posibilitado la integración y compromiso de los organismos de la Administración Central del Estado que intervienen en el desarrollo del sector agropecuario. De manera especial comentó la apreciación que existe desde la base productiva y los productores acerca la utilidad y oportunidad de las medidas adoptadas, así como la rapidez con que se están enmendando los errores y desviaciones.

Muchos y diversos son los retos que tiene por delante el sector en el camino de la total implementación de las medidas, entre los cuales el Ministro de la Agricultura destacó la necesidad de priorizar el programa de la agricultura urbana, suburbana, la soberanía alimentaria y la educación nutricional, así como la siembra de patios y parcelas; avanzar en el desarrollo de las minindustrias y en la ejecución de proyectos de desarrollo local; fortalecer el control sobre el uso y tenencia de la tierra  y la atención a los usufructuarios; el control a la siembra de alimento animal con prioridad en las plantas proteicas y el aprovechamiento de los residuos de cosechas e industriales; así como el incremento de las producciones para la exportación y su diversificación.

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Jorge Luis Tapia Fonseca acotó que en toda esta dinámica también es vital la producción de alimento animal. Foto: Estudios Revolución.

Y EN LA INDUSTRIA ALIMENTARIA TAMBIÉN

Como parte consustancial del asunto, el Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) ofreció a las diputadas y diputados un informe sobre la incidencia de las 63 medidas para dinamizar la producción y comercialización de alimentos en ese sector, así como las acciones desarrolladas para su aplicación y el impacto que van teniendo en la industria.

El titular del organismo, Manuel Sobrino Martínez, reconoció que el proceso incluye erradicar los problemas subjetivos que han impactado en el ramo, como la deficiente gestión empresarial, la insuficiente vinculación con las formas productivas, la deficiente aplicación de la ciencia en los procesos productivos, la mala contratación y calidad del contrato, los impagos a los productores, y los precios desestimulantes para ellos.

Al subrayar el impacto de las medidas, que está implicando un cambio radical en el hacer del sector, explicó que a partir de mayo pasado, cuando empezaron a aplicarse, comenzó una nueva etapa de contactos, discusiones y contratación por parte de la industria con los productores lecheros y de carne.

No obstante, reconoció que no se llegó al cien por ciento de los  tenedores de ganado y faltó calidad en la contratación; al mismo tiempo continuaron incumplimientos en la entregue de carne contratada.

Apuntó además que los precios aprobados para el litro de leche inicialmente, como parte de la Tarea Ordenamiento, no cubrían los costos reales en que incurren los productores, pero la medida fue corregida por el Gobierno nacional, que en octubre aprobó un incremento del valor del litro de leche hasta 20 pesos, siempre y cuando se cumpla con la calidad requerida, además de la aprobación de otros precios para servicios vinculados a la actividad.

Sobrino Martínez informó sobre otras decisiones que han provocado una transformación en el modo de gestión de la industria, en su estructura, en los pagos vinculados a los resultados y otros estímulos a la producción industrial.

Como impactos positivos de las 63 medidas, el titular del MINAL refirió que hasta noviembre se sobrecumplen contratos de entrega de ganado vacuno a la industria; se han comprado en Moneda Libremente Convertible volúmenes de ganado vacuno por un valor cercano a los 400 000 MLC, dinero que va directamente a los productores primarios; y a productores porcinos se les han hecho compras por más de medio millón de MLC.

Aunque en la entrega de leche hay incumplimientos, más de 9 500 productores han sobrecumplido sus planes y facturado más de millón y medio de MLC por la compra de más de 14 millones de litros de leche, agregó Sobrino Martínez, y el pago se está haciendo con prontitud.

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El MINAL ofreció a las diputadas y diputados un informe sobre la incidencia de las 63 medidas para dinamizar la producción y comercialización de alimentos en ese sector. Foto: Estudios Revolución.

EL LEGISLATIVO OPINA

El diputado Emilio Interián Rodríguez, un destacado productor de leche, fue el primero en intervenir en un debate en el que participaron más de una decena de legisladores. Destacó que con las medidas aprobadas el productor «se convierte en el eslabón más importante de la cadena, como debía ser».

«En la gente del campo se respira un ambiente muy favorable», atestiguó más adelante, aunque reclamó que ante la actual limitación de recursos, los pocos que se dispongan deben ser puestos donde los resultados más se multipliquen, donde haya sentido de pertenencia.

El diputado Sergio Rodríguez Morales, un reconocido investigador y extensionista de las ciencias agrícolas, recordó que las 63 medidas para la dinamización de la agricultura requieren de más de 600 acciones para implementarlos, lo que exige, por tanto, una integración entre todos los organismos que de una forma u otra están vinculados a la producción de alimentos.

Recordó que la producción agropecuaria en Cuba se desarrolla en un escenario muy complejo, porque el 70 por ciento de sus suelos son poco productivos, el 30 por ciento está afectado por salinidad, el período lluvioso se ha acortado, y debido al cambio climático «hoy nadie sabe ni cuándo va a llover ni cuándo va a escampar», entre otros obstáculos naturales y humanos.

Por todo ello, y otras muchas dificultades, «el esfuerzo que hoy hacen hoy nuestros agricultores es digno de reconocer», señaló Rodríguez Morales, quien afirmó que el campesinado cubano está muy comprometido con el país y la Revolución.

El diputado Ramón Aguilar Betancourt se refirió a los procesos de contratación en todo el hacer agropecuario. Para bajar los precios es fundamental la contratación, de forma tal que permita que las empresas y las cooperativas lleven más productos a los mercados y así disminuir los intermediarios, afirmó.

El diputado y Vice primer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca acotó que en toda esta dinámica también es vital la producción de alimento animal. Tenemos tierras; en Cuba se da el maíz, la soya, el sorgo, el girasol; tenemos los derivados de la caña, lo subproductos agrícolas; tenemos las plantas proteicas... Ante las millonarias importaciones de alimento animal, la producción de ellos en el país es la mejor variante.

Al inicio de las discusiones, el diputado Luis Velázquez Pérez, presidente de la Academia de Ciencias de Cuba, subrayaría que las 63 medidas son un reflejo del impulso de la ciencia y la innovación a favor de resolver los problemas materiales y sociales, un movimiento cuyo principal impulsar es el Primer Secretario del Comité Central del Partido, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y que ha sido muy exitoso en el enfrentamiento a la COVID-19, agregó.

Al inicio, nosotros, los científicos, teníamos muchas dudas sobre cómo llegar a los agricultores, pero con las 63 medidas se ha demostrado la eficacia de la aplicación de la ciencia y la innovación a la producción alimentaria, afirmó el Doctor en Ciencias Ramón Aguilar Betancourt.

Estamos asistiendo —agregó— a un proceso donde se está dinamizando el sistema agropecuario «aplicando el método científico como una manera superior de lograr la soberanía alimentaria que el país necesita para el tiempo presente y el futuro», porque Cuba dispone —sentenció— de «lo que nadie tiene en el mundo: el potencial humano formado por la Revolución, que quiere avanzar y ama a esta tierra».

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En la gente del campo se respira un ambiente muy favorable. Foto: Estudios Revolución.