Que el Caribe siga siendo un hermano entrañable
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El miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, presidió este sábado la gala político-cultural en homenaje a las tres décadas de relaciones diplomáticas entre Cuba y San Vicente y las Granadinas
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Estudios Revolución

Para definir las relaciones entre Cuba y San Vicente y las Granadinas hay palabras imprescindibles: solidaridad, integración regional, amor al pueblo, a sus líderes... y así lo hizo saber este sábado el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, al intervenir en la gala político-cultural en homenaje al 30 aniversario del establecimiento de nexos diplomáticos entre ambas naciones.

Fue el 26 de mayo de 1992 la fecha que marcó el inicio de la hermandad entre los dos países caribeños y, al decir del Jefe de Gobierno, en su posterior desarrollo y consolidación siempre desempeñó un papel esencial la entrañable amistad del primer ministro sanvicentino, Ralph Gonsalves, con los líderes históricos de la Revolución cubana, Fidel y Raúl, así como su cercanía con el Primer Secretario del Partido y Presidente, Miguel Díaz-Canel.

Cuba, aseguró Marrero Cruz, «siempre ha contado con el irrestricto apoyo de San Vicente y las Granadinas en la lucha por la definitiva eliminación del bloqueo reforzado, que aún persiste y daña profundamente al pueblo, y cuyo carácter extraterritorial afecta nuestros vínculos con las demás naciones».

Y como la gratitud es propia de los pueblos nobles, el Primer Ministro agradeció la «permanente y generosa solidaridad con la Revolución», al tiempo que reconoció en Ralph Gonsalves «a un líder político, firme defensor de la integración y la unidad regional caribeña, como principio esencial para el progreso de los pequeños estados insulares en desarrollo».

Más adelante subrayó la postura de San Vicente y las Granadinas en defensa de la autodeterminación, la soberanía y la independencia de los pueblos, posición que se acerca notablemente a las corrientes políticas más progresistas de la región, con las cuales Cuba se identifica.

De la colaboración en materia de salud también habló Marrero Cruz, pues hoy laboran en ese país 74 especialistas cubanos y otros 18 se sumarán el próximo mes de junio; y en cuanto al ámbito educacional, ya se han formado aquí 301 jóvenes sanvicentinos en áreas prioritarias para el desarrollo económico y social de su tierra.

A esa cooperación, «al contacto pueblo a pueblo» ya había aludido minutos antes el Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas, quien afirmó que «la relación con Cuba es similar a la que se tiene en el seno de una familia, y los parientes nunca se abandonan».  

Hoy, aseveró Ralph Gonsalves, «existe un gran amor de los sanvicentinos hacia Cuba, su Gobierno y su Revolución, y ese amor es una huella indeleble que se mantendrá firme ante cualquier tempestad».

Reiteró el apoyo en la lucha contra el bloqueo y rechazó, una vez más, la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua de la IX Cumbre de las Américas, decisión que catalogó de «errónea, arrogante y ultrajante».

En la gala, espacio de confluencia de la cultura cubana y caribeña, participaron, además, el vice primer ministro, Ricardo Cabrisas Ruiz; la señora Eloise Gonsalves, esposa del Primer Ministro sanvicentino; así como otras autoridades del Estado y el Gobierno cubanos y miembros de la delegación visitante.