El camino de Cuba está en la ciencia
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Así aseguró el Presidente Díaz-Canel en un encuentro de trabajo que analizó el aporte de la ciencia, la tecnología y la innovación a la agroindustria azucarera. El mandatario chequeó además los programas de la Tarea Vida y la Memoria Histórica.
Chequeo de programa científico, memoria histórica y tarea vida 27082019

Estudios Revolución

El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, aseguró que el camino del país está necesariamente en la ciencia, al evaluar la marcha del Programa Científico en un encuentro de trabajo que centró el análisis en la contribución de la ciencia, la tecnología y la innovación a la agroindustria azucarera.

El  mandatario consideró que en Cuba se han hecho muchas investigaciones relacionadas con la producción de azúcar, que con los años se dejaron de aplicar o se engavetaron. Urge actualizar esos estudios y llevarlos a mayores escalas – dijo – porque la economía del país necesita de la agroindustria azucarera; además es parte de nuestra cultura e historia.

Díaz-Canel destacó la amplia gama de derivados que hacen de este un sector rentable y productivo, entre ellos la energía, los fertilizantes, la cera, el alcohol, los tableros de bagazo, los medicamentos, el ron y el alimento tanto para los humanos como para los animales. Se necesita enfoque y análisis de procesos, innovación, tecnologías y la mejor manera de financiarlas para lograr el cambio. La contribución de las universidades y centros de investigación es decisiva, acotó.

Ponderó, además, la cantidad de profesionales, investigadores y trabajadores de experiencia con que cuenta la agroindustria azucarera en el país para enfrentar su modernización.

Al respecto, el vicepresidente del Grupo Azucarero AZCUBA, Noel Casañas Lugo, detalló la actividad científica del sector, que se inició desde 1963 con la creación del Instituto Cubano de Investigaciones de los Derivados de la Caña de Azúcar (ICIDCA) y un año más tarde el Instituto de Investigaciones de la Caña de Azúcar (INICA); el primero fundado por Ernesto Guevara y el segundo por el Comandante en Jefe Fidel. Ambos son hoy dos consolidadas entidades de Ciencia.

Según apuntó, durante el año 2019 se trabajó en 78 proyectos de investigación. Los servicios a la base productiva se dirigieron sobre todo a la fertilización, el control de malezas, los productos fitosanitarios, las variedades de plantas y las semillas.

No obstante, agregó el directivo, existen brechas por cubrir con ciencia e innovación en la introducción de variedades foráneas, en la preparación de las tierras, en el riego y el drenaje, así como en la aplicación de la agricultura de precisión. A ello se suma la falta de investigaciones sociales sobre la base productiva, el cooperativismo y el desarrollo rural.

Acerca del tema, la ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, Elba Rosa Pérez Montoya, enfatizó en la necesidad de que la ciencia desempeñe un papel protagónico en el sector de la agroindustria azucarera, para mejorar los resultados de la producción y comercialización, con la consiguiente generación de exportaciones y sustitución de importaciones.  

TAREA VIDA Y MEMORIA HISTÓRICA

Durante la jornada de trabajo, el Presidente Díaz-Canel pasó revista también a los programas de la Tarea Vida y la Memoria Histórica, temas a los que de manera habitual se les da seguimiento desde el Gobierno.

En el primero de ellos, se presentó la implementación del Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático en la provincia de Granma, territorio que ha definido para el trabajo cuatro zonas priorizadas por el nivel de afectación: las ciudades costeras amenazadas por la subida paulatina del mar en los municipios de Niquero y Manzanillo; las playas arenosas con erosión intensa, particularmente Punta Hicacos, en el municipio de Pilón; la carretera Santiago– Pilón, muy vulnerable ante la elevación del mar y los eventos naturales; así como las zonas costeras desprotegidas con intrusión salina, que pueden comprometer los planes arroceros y el desarrollo de la camaronicultura, desde Punta Birama hasta Manzanillo.  

Sobre este asunto, Díaz-Canel indicó prestar especial atención al Golfo de Guacanayabo, donde existen indicios de reducción de especies marinas; a la salinización de la cuenca del río Cauto y las presas que abastecen a la población; así como a los acueductos de Bayamo y Manzanillo.

En la reunión se analizó igualmente la estrategia del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) para el enfrentamiento al cambio climático, con especial énfasis en lo referido a elevar la percepción de riesgo y aumentar los conocimientos y la participación de todo el pueblo en la Tarea Vida.

Según explicó Mabel Manso Delgado, vicepresidenta del ICRT, este es un tema al que se le da seguimiento en la programación informativa, en los espacios especializados de ciencia y de manera particular en las emisoras y telecentros ubicados en los litorales del archipiélago cubano. Un reciente estudio realizado por el Centro de Investigaciones Sociales del ICRT dio cuenta de que el 58.3% de los encuestados conocía en qué consiste la Tarea Vida y las acciones que desarrolla el país.

Díaz-Canel consideró al respecto que había que aprovechar todos los espacios posibles para comunicar sobre el cambio climático de forma novedosa, atractiva, con historias de vida, a través de novelas, series y cualquier otro audiovisual. Se refirió específicamente a los canales de la red social Youtube, donde los jóvenes cubanos consumen mucha información.

Más adelante, en la agenda del chequeo al Programa para la Conservación de la Memoria Histórica se incluyó un análisis sobre la preservación del patrimonio bibliográfico y documental en la provincia de Granma, territorio que se reconoció por su trabajo sistemático y la calificación, experiencia y sentido de pertenencia de quienes allí cuidan la memoria de la nación.   

Además, Marta Ferriol Marchena, directora general del Archivo Nacional de la República de Cuba, dio cuenta del proceso inversionista y las acciones de mantenimiento que durante el primer semestre del año permitieron mejorar las condiciones de trabajo en archivos históricos provinciales y municipales, así como en las bibliotecas. Ello denota, apuntó, la importancia que el Gobierno viene otorgando desde hace algunos años a la conservación del patrimonio cubano.