Díaz-Canel en Santa Ifigenia: “Fidel nunca se rindió”
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A media mañana, en el Cementerio Patrimonial de Santa Ifigenia en la heroica provincia de Santiago de Cuba, el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, rindió tributo este 13 de agosto al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien ha entrado a cumplir el siglo de su valioso legado. El dignatario ofreció declaraciones a la prensa.
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Estudios Revolución

SANTA IFIGENIA, Santiago de Cuba.-“Fidel es eterno”. Temprano leímos, este 13 de agosto, esa frase conmovedora, rotunda, en un texto salido a la luz en el sitio oficial de la Presidencia. Titulado “¡Y venceremos!”, las líneas pertenecen al Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista, Miguel Díaz-Canel Bermúdez. 

La frase, poética y a la vez tan exacta, ha quedado explicada por el dignatario: “Fidel es eterno, no por decisión propia o de quienes intentamos seguir sus pasos y dar continuidad a su inmensa obra de justicia social. Alcanzó esa condición al interpretar, sintetizar y hacer suyo el acumulado magnífico del ideario independentista, anticolonial, antimperialista y marxista cubano, latinoamericano, caribeño y universal que le antecedió, hasta situarse en la vanguardia para todos los tiempos”.

La eternidad, como siempre sucede en cada encuentro con la Patria, gravitó sobre todos a media mañana de este miércoles 13 de agosto en el Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia, allí donde Díaz-Canel -acompañado del miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales Ojeda, así como de las máximas autoridades de la heroica provincia de Santiago de Cuba- rindió honores a Fidel.

Foto: Estudios Revolución

Frente a la piedra que entraña la eternidad de una vida ejemplar, dedicada a millones de seres humanos, el Presidente puso un ramo compuesto por rosas rojas, por mariposas blancas, y por “aves del paraíso”. Allí, quedó colocada una ofrenda en cuya cinta podía leerse: “A Fidel Castro Ruz del pueblo de Cuba”. Y por allí desfiló este 13 de agosto el pueblo santiaguero, desde niños, hasta ancianos, de los cuales alguno lanzaba alguna frase al aire, o dejaba escapar una lágrima de gratitud y nostalgia.

Bajo un cielo azul claro y sin nubes, el Jefe de Estado también rindió tributo, en Santa Ifigenia, a José Martí, a Carlos Manuel de Céspedes, y a Mariana Grajales. Era muy difícil racionalizar la eternidad, pero allí estaba con su peso incorpóreo y sagrado. Y en un momento de la mañana, al concluir el tributo, el equipo de prensa de la Presidencia de la República pidió a Díaz-Canel algunas ideas a propósito de la frase –“Fidel es eterno”-, y de que en el artículo mencionado él hubiese resaltado la capacidad del Comandante en Jefe de haberse sabido sobreponer a todo revés.

“Hoy es uno de esos días en que los sentimientos se revuelven”, respondió el mandatario; e hizo alusión a “todos los sentimientos revolucionarios, los sentimientos que tienen que ver también con las convicciones, y sobre todo con la responsabilidad en defender esas convicciones”.

Foto: Estudios Revolución

Díaz-Canel Bermúdez comentó a los reporteros: “Hoy es un día en que necesariamente uno acude a Fidel. Y creo que hay un legado enorme de Fidel. Muchas personas lo han descrito de manera brillante desde sus visiones. Yo no creo que pueda superar alguna de esas visiones tan perfectas que han escrito personas muy vinculadas a él. Pero creo que ahora, con lo que nos hemos propuesto de conmemorar el centenario del natalicio de Fidel, la mejor manera de defender ese legado es encontrar sus esencias, apropiarnos de esas esencias, y traer a Fidel al momento actual”.

“Ese sería el mayor sentido de la vida de un revolucionario cubano en estos tiempos: cómo encontramos respuestas, desde ese legado de Fidel, para la solución de los problemas actuales”.

Hay muchos elementos de inspiración, reflexionó el dignatario; y compartió razones: “Fidel nunca se rindió; Fidel siempre estaba pensando en la victoria; Fidel se anticipaba a la victoria; Fidel tenía una convicción del optimismo, de la capacidad de superar los retos más difíciles, los desafíos”.

El Presidente cubano resaltó el mérito, en Fidel, de haber pasado de “la convicción a la capacidad de vencer”. Y definió: “Eso está muy bien expresado en una consigna que él compartió y que se ha hecho, más que una consigna, nuestro sentido de la vida: Patria o muerte: ¡Venceremos!”.

Foto: Estudios Revolución

“Por la Patria se puede dar todo, hasta la vida, pero siempre porque vamos a vencer defendiendo a la Patria”. Y en ese punto de sus declaraciones el dignatario recordó una idea ya compartida recientemente desde uno de sus discursos: “Fidel, con su Generación del Centenario, en uno de los momentos en que entra a la historia es con el asalto al Cuartel Moncada. Y digamos que desde el punto de vista militar puede concebirse como que fue un revés; pero Fidel convirtió ese revés en victoria; o sea, entró con la Generación del Centenario a la historia, convirtiendo un revés en victoria”.

Díaz-Canel enfatizó que “ahí está una parte importante de las raíces de esa convicción que nos ha hecho invencibles, que es nuestra resistencia. Y como hemos expresado en otros momentos, nuestra resistencia es emocional, es una resistencia de compromiso, es una resistencia de convicción, y es una resistencia también creativa”.

Sobre la Cuba actual, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista expresó: “Sé que la situación que estamos viviendo es muy compleja. Todos los días sentimos la dureza de estos tiempos. Sabemos de todas las carencias que tenemos, de todas las dificultades que estamos enfrentando, de la molestia de los apagones, de la economía que tenemos semiparalizada por déficit de combustible, por déficit de financiamiento; pero es que todos los momentos de la Revolución han sido duros, porque en todos los momentos de la Revolución hemos tenido la agresividad imperial”.

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“Pero la Revolución, en todos los momentos difíciles, ha vencido. Por lo tanto, traer a Fidel a este tiempo es también creer y estar seguros de que nosotros, esta situación, también la vamos a superar, y que vamos a vencer; que no hay reveses -hay situación compleja pero no hay reveses-. El revés sería si se perdiera la Revolución, y aquí estamos”.

El mandatario reflexionó que “hemos soportado los primeros años, muy agresivos, de una administración Trump; hemos soportado después los años de continuidad de esa política agresiva con una administración Biden y con pandemia, con bloqueo recrudecido; y ahora estamos ante una segunda administración Trump, rodeado de una camarilla de personas con un odio visceral hacia Cuba, hacia la Revolución”.

Foto: Estudios Revolución

“Estamos en medio de una situación compleja también desde el punto de vista económico y social, como hemos descrito; pero tenemos la convicción -cuando hablo de convicción hablo de seguridad y está en ese legado- de que nosotros venceremos”.

Esa actitud, dijo Díaz-Canel, “es traer a Fidel a estos tiempos. ¿Cómo lo hacemos? ¿Cómo lo logramos? ¿Cómo enaltecemos ese legado, llevándolo a resultados en momentos difíciles? Eso nos emancipa. Defender ese legado nos emancipa. Y yo creo que esos son los sentimientos que hoy uno pudiera expresar de una manera más breve, más concisa, y sobre todo asumiéndolo con la responsabilidad que tenemos de salvar la Patria, de salvar la Revolución, de salvar la construcción socialista en medio de la adversidad”.

Bajo un sol intenso, el mismo que tantas veces iluminó la voluntad de nuestros mambises, el Presidente cubano afirmó: “No hay reveses. Va a haber victoria”.